lunes, 16 de enero de 2012

El Cuadro de Mando como herramienta eficaz en la gestión empresarial

El Cuadro de Mando (CM), Tablero de Control o 'Balanced scorecard' en la lengua sajona, es un conjunto de información (no datos) que representa el estado de situación de las principales variables del negocio (PKI - Principal Key Indicators) para las que deseamos realizar un seguimiento, representando una poderosa herramienta de gestión para los directivos de una empresa, que no tienen tiempo para bajar la detalle de cada línea de negocio o aspecto concreto, permitiéndoles una visión global para la toma de decisiones.

Sus origen se sitúa en la década de los 80´s en las empresas francesas bajo el nombre de 'Tableau de de bord', aunque su impulso definitivo no tendría lugar hasta el año 1992 cuando los dos economistas Robert Kaplan y David Norton en la Harvard Business Review irrumpieron con una novedosa herramienta de gestión que supondría un antes y un después en la gestión empresarial y en el management, el CMI (Cuadro de Mandos Integral).


Hoy en día es una herramienta esencial para la gestión empresarial, hasta el punto de que los principales reportes de información no se podrían establecer sin él. No obstante, para realizar un uso adecuado para lograr la mayor eficacia y potencialidad posibles, necesitamos que en su proceso de elaboración se aborden los siguientes aspectos:
  1. Oportunidad de la información: un CM debe contemplar información útil, partiendo de la base de que no porque aportemos más información será más completo, sino que en este caso más bien conseguiriamos el efecto contrario, el de 'ahogar' a sus destinatarios en un conjunto de información complejo, dificultando que en él se aprecie el mensaje que se busca y la subsiguiente toma de decisiones
  2. Visión temporal: como gestores de una empresa o negocio necesitamos evaluar las distintas magnitudes con el paso del tiempo, para determinar si dentro de un mes, un semestre o un año hemos empeorado o reactivado una cierta faceta del negocio, por lo que dentro de este objetivo es muy importante introducir el eje temporal para poder realizar un seguimiento de los PKI que más nos interesan
  3. Estabilidad de los procedimientos de medida: para que una variable determinada sea comparable a futuro necesitamos que la forma en la que obtenemos la información sea estática en el tiempo tanto en términos de definición como de profundidad
  4. Coordinación: para que su elaboración se traduzca en una gestión eficaz es muy importante que las distintas áreas de la empresa cooperen en su elaboración, para evitar de este modo que se produzcan las tan indeseadas duplicidades de información, con el objetivo de que quien tenga que tomar las decisiones cuente con un conjunto de información 'cerrado' y único, tomando todas las decisiones sobre una base común
  5. Comunicación de la información: la razón principal es su confección para la alta dirección de la compañía, pero también es muy recomendable reportarlo a los responsables de todas las áreas de impacto con el objetivo de que mediante su lectura e interpretación se puedan anticipar a las posibles desviaciones e informar en su caso a la alta dirección sobre los planes correctivos oportunos
En conclusión, si logramos implementar un CM óptimo, habremos alcanzado una poderosa herramienta de gestión en nuestra empresa, organización o institución. En la que muchas veces, como consecuencia de problemas de síntesis de la información, se pueden camuflar los principales problemas y riesgos a los que nos enfrentamos. Por tanto, el correcto registro, almacenaje, tratamiento y publicidad de las variables de la entidad que deseamos controlar, tiene consecuencias directas y muy positivas sobre una gestión eficaz.

Equipo de redacción dE

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