La crisis económica sigue avanzando y afectando cada día a más estratos de la población, encontrando en la denominada clase media a un creciente número de personas que han perdido su empleo, y que por sus circunstancias, están obligados a acudir a la asistencia social, cuando hace tan solo unos años no lo imaginaban ni tan siquiera en el más ácido de los escenarios.
Lo cierto es que cada vez hay un mayor número de personas, empleados cualificados y con un cierto estatus económico, que tras haber perdido su empleo, se han quedado sin ingresos con los que afrontar sus compromisos financieros.
Hasta hace relativamente pocos años el perfil de las personas desfavorecidas, y parecía utópico que pudiese afectar también a las clases medias, pero la realidad lo constata, y además, sin visos de cambiar en los próximos meses.
Como consecuencia de esta situación cada vez es más frecuente escuchar sermones y opiniones negativas sobre la situación socioeconómica, pero, ¿quién imaginaba que la crisis iba a llegar cuando nos encontrábamos en plena burbuja?
Equipo de redacción dE
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