Si hay un hecho diferencial que resalta las características del mercado energético en Latinoamérica es la estrecha interconexión entre materias primas y gobiernos, o si se prefiere, entre energía y la política. Aunque todos los países del planeta mantienen estratégicas posiciones políticas en materia energética y de recursos naturales, en latinoamérica los símbolos nacionales tienen mucho peso en la sociedad y en la política de sus países.
Contar con "campeones nacionales" (compañías estatales) en petróleo y gas fundamentalmente, es visto como un signo de poder y soberanía nacional, teniendo un alto valor para la región. Ahora bien, ¿por qué los países latinoamericanos con grandes reservas de gas y petróleo no se encuentran entre los más ricos y desarrollados del planeta?
La explotación extranjera de los recursos naturales latinoamericanos durante siglos, ha influido necesariamente en su percepción empresarial de los conceptos de capital e inversión, tal y como está interiorizada por europeos o estadounidenses. Explotar en beneficio propio aquellas riquezas naturales, y no en el de otras potencias foráneas, es una estrategia buena o necesaria en sí misma pero no suficiente. Requiere del acompañamiento de otras medidas que favorezcan el desarrollo del país.
Los países latinoamericanos, con una importante concienciación nacionalista, constituyen sociedades muy heterogéneas entre sí, pero mantienen un consenso social bastante importante en torno a los símbolos nacionales que suponen las materias primas y los recursos naturales.
Los aspectos positivos de las políticas aplicadas en latinoamérica con el hecho de explotar estatalmente sus yacimientos petrolíferos y de gas son, por un lado, el dominio sobre sus ingresos inyectados directamente sobre sus finanzas públicas, financiando al Estado. Y por otro lado, evitan que multacionales o agentes extranjeros se inmiscuyan indirectamente en asuntos de política interna, a raíz de su participación en sectores clave para cualquier país como es el energético.
Entonces, ¿qué es lo que lastra el adecuado crecimiento y desarrollo de América Latina? Los principales problemas son:
- Sistema político/Política económica: Es necesaria una democracia real en estos países. Los regímenes (pseudo) dictatoriales carentes de una importante alternativa (oposición) política seguirán tendiendo a la concentración de poder, a la exaltación de valores nacionalistas entre la población, pero sin unas políticas económicas acordes a un modelo de crecimiento del siglo XXI.
- Redistribución: La riqueza que generan estos recursos es repartida entre gobernantes y clases altas de la sociedad mientras que el grueso de la población se mantiene con poco o nada. Los empleos directos e indirectos que generan las industrias petrolíferas y de gas no son para nada suficientes.
- Valores: Políticamente no se alientan los valores y la ética del trabajo. Esto se traduce en la generalización de un sistema totalmente asistencialista que mantiene paralizadas las sociedades y su desarrollo. Con unos precios del petróleo elevados, los ingresos repercuten en el Estado que son reinvertidos en el sector primario energético en lugar de potenciar lo que verdaderamente genera riqueza y valor añadido en un país: educación, I+D+i, infraestructuras, industria, etc.
- Bloqueo de inversiones extranjeras: El nacionalismo energético también evita la inversión, la innovación y el desarrollo tecnológico, ya que o bien no dejan entrar al capital extranjero o bien le dan ciertas concesiones bajo condiciones tributarias leoninas.
Estos factores explicarían por qué países que supuestamente deberían ser muy ricos y desarrollados, se mantienen alejados de otros que en cambio no mantienen esos recursos naturales tan valiosos y que además tienen que comprarlos en el mercado a precios elevados. Aunque hay que añadir que no es situación única la que se da en Latinoamérica. En Rusia y Oriente Medio el nacionalismo energético también mantiene estancado el desarrollo económico de sus sociedades.
Equipo de redacción dE
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